Las buenas noches

Me desvisto lenta y serenamente, me pongo mi pijama y siento como mi almohada roza tentadoramente mis cabellos.

Fijo mi mirada hacia el techo y entonces se levanta el telón para crear e imaginar las sensaciones más placenteras causadas por mi deseo frustrado y el roce de mis dedos.

Tocando y rozando lentamente mis pezones, llego a imaginar que es tu húmeda lengua, comienzo a recordar el olor de tu aliento sobre mi boca y mi cuello. Recuerdo la suavidad de tus manos, y ese recuerdo lo traslado hacia mi vientre... bajando pausada pero desesperadamente.

Mis pupilas se dilatan, mi respiración se acelera... suelto gemidos silenciosos.... comienzo a sudar y es entonces cuando.... puuum! llega la explosión maravillosa...

Tranquilamente me incorporo de nuevo, embozo una sonrisa de satisfacción, me acomodo en mi cama a tomar fuerzas para el siguiente round.